Frida Kahlo.
Desde el fondo de el universo
sustrajiste las formas que
vieron perdurar tu existencia,
las metáforas se arrancaron
de tus manos para sumergirse
en las telas que pintaste
entre sueños y dolores.
La cadencia de tu mirada
abarco la formas que
deambulan en lo infinito
del espacio,
y con la generosidad de tus manos
la poesía se sumergió entre
la paleta y los colores
abarrotados en tus ojos.
Con tus pupilas fulminantes
escrutaste la naturaleza
extrayendo lo esencial de las cosas,
la pasión se incrusto en tu epidermis
transformando el entorno
en un paisaje preñado con los símbolos
que tu extrajiste desde lo más
celeste del firmamento para
compartirlos conmigo.
El sol, la lluvia y la noche
tejieron la tela con la que
te arrebozas en las tardes
de tristeza.
Definitivamente le distes
vida al cuerno de la abundancia
llenándolo de las cosas fundamentales
de nuestra memoria,
las banalidades cayeron
destrozadas cada vez
que esgrimiste los pinceles
apuntando al sentido real
de nuestros pasos caminando
los pasos enrevesados del paisaje.
La magia fue el estandarte que enarbolaste
cada vez que la adversidad te mostró
la faz cruel de las mentiras,
y con ella desbarataste las murallas
de los engaños.
El jaguar subió tu cuerpo
por entre tus venas
anidándose en tu corazón
para más tarde ofrendarlo
a los dioses desde lo más
alto del nopal.
Frida Kahlo.
From the depths of the universe
you remove the forms
they last saw your existence,
the metaphors were pulled
from your hands to plunge
on canvas painted
between dreams and pains.
The cadence of your look
spanned the forms
that roam the infinite
of space,
and the generosity of your hands
plunged between poetry
the palette and the colors
crammed into your eyes.
With your fulminant pupils
scrutinize nature
extracting the essence of things,
passion embedded in your skin
transforming the environment
in a landscape fraught with symbols
that you extracted from
the blue of the sky to
share with me.
The sun, the rain and the night
wove the cloth with which
cover you in the evenings
of sadness.
You definitely gave
life to the cornucopia
filling with the fundamental things
of our memories,
the banalities fell
shattered every time
that brandish the brushes
pointing to the real meaning
of our steps walking
the convoluted landscape steps.
The magic was the banner hoisted
whenever adversity showed you
the cruel face of lies,
and with it got to pieces the walls
of deceptions.
The jaguar climb up your body
between your veins
nestling in your heart
to offerings it later
to the gods from the most
high cactus.