Este homenaje debemos hacerlo extensivo a todos aquellos compatriotas que cayeron defendiendo esos mismos ideales, en todos los rincones de la patria. Pues ellos representan todo aquello que otros no lo tienen, el de querer realmente a sus semejantes y de tener el corazón bien puesto, de luchar cara a cara con sus oponentes usando el díalogo y la palabra, ellos representan esa sangre valiente y limpia que recorre los nervios neurálgicos de nuestra geografía.
Para ellos vaya lo mejor de nuestros recuerdos, ya que encarnan todo aquello que siempre nos ha llenado de orgullo el de ser verdaderos chilenos.