Treinta y tres.
Son treinta tres alcatraces volando unísonos
tocando la piel húmeda del océano
sus alas suaves tocan la piel de las esperanzas
que en un último esfuerzo tratan de detener
la caida del sol sobre la tierra.
Son treinta tres mineros enterrados
en el vientre pétreo de la tierra
arrullados por el
canto tutelar de
los dioses de la tierra,
solo el alma
de un pueblo hundido entre la bruma
alza sus brazos solidarios haciendo bramar
las alturas de las montañas con el sonido
de su música.
Pero también, son más de treinta tres mapuches enterrados
en el vientre sediento de la bestia, son treinta tres
hombres de la tierra recibiendo la migajas
de un rescate hollywoodense,
pero los otros, que son más de treinta tres
no mineros, padres, hermanos, hijos
en la tierra del Pillán
no tendrán máquinas inverosímiles,
no tendrán tramoya,
solo la farándula cínica, descarnada
de los hacedores de riquezas que con sus fistulas
hediondas claman justicia.
Son treinta y tres y más.
Thirty-three.
There are thirty-three pelicans in unison fly
touching the moist skin of the ocean
their soft wings touch the pelt of hopes
that in a final effort trying to stop
the sundown on earth.
There are thirty three miners buried
in the stone belly earth
cooing by the
tutelary song
of the earth’s god,
only the soul
of a people sunk in the mist
raises his arms in solidarity making roar
the heights of the mountains with the sound
of his music.
But also, more than thirty three Mapuches buried
in the hungry belly of the beast, are thirty-three
men of the land receiving the crumbs
of a Hollywood rescue style
but others who are more than thirty-three
non-mining, parents, siblings, children
in the land of Pillán
they will not have machines implausible
they will have no props,
only the cynical celebrity, scrawny
of the wealth makers with stinking
fistulas seek justice.
There are thirty-three and more.